Tras el ataque, los transportistas de la línea S de la empresa Acuarius dijeron que no saldrán a trabajar hoy por temor a que puedan continuar estos actos extorsivos.
El vehículo de carga pesada se dirigía de sur a norte, pero no pudo frenar a tiempo ante aparentes fallas mecánicas, impactando con los autos que se encontraban a la espera de pasar su turno en el peaje.